Un garaje abierto es una estructura que permite guardar el automóvil bajo techo, sin necesidad de estar cerrado con puertas o muros. Tener un garaje para el auto proporciona seguridad ante un posible robo si lo estacionamos en la calle. Al tenerlo al interior, nos será más cómodo y estaremos protegidos al entrar y salir de la casa. Por tener un techo, el garaje abierto también ayuda al mantenimiento del auto, protegiéndolo de las inclemencias del clima como el sol, la lluvia y el polvo. En las ciudades peruanas cada vez más aumenta el tráfico automotor, por lo que las casas urbanas demandan no sólo tener una cochera sino incluso dos o más.
En una casa, se tiene la ventaja de poder planificar el espacio que se le asignará al garaje abierto dentro del terreno con la ayuda de un profesional. El constructor será el encargado de definir el lugar más adecuado para situarlo. En el frente de la casa o en un espacio lateral la ubicación debe permitir un recorrido sin obstáculos y protegido entre el garaje y el interior de la casa. En cambio en los edificios de departamentos, los garajes por motivos de espacio no son abiertos, se resuelven como plazas de estacionamiento en el primer piso o en sótano y terminan siendo lugares impersonales.